Las válvulas de mariposa son esenciales en la regulación del flujo de líquidos y gases en una variedad de aplicaciones industriales. El diseño de "sellado blando" se refiere a la utilización de materiales flexibles que permiten un cierre hermético, minimizando las fugas y mejorando la eficiencia del sistema. Este tipo de válvula es ideal para aplicaciones donde se requieren condiciones de operación críticas, como en la industria química, petroquímica y de tratamiento de aguas.

    Uno de los principales beneficios de las válvulas de mariposa de sellado blando con brida eléctricas es su facilidad de operación. La integración de un sistema eléctrico permite un control preciso y automático del flujo, lo que resulta en una mayor eficiencia operativa y un ahorro significativo de tiempo y recursos. Además, este tipo de válvulas puede ser fácilmente monitorizado y controlado a través de sistemas de automatización industrial, lo que las convierte en una opción preferida para muchas instalaciones modernas.